¿QUÉ ES EL TROTSKISMO?
Las ideas de León Trotsky y el trotskismo han sido muy difamadas y distorsionadas a lo largo de la historia, pero ¿quién fue León Trotsky? ¿qué es el trotskismo? y ¿cuál es la relevancia para las luchas que enfrentamos hoy en la década del 2020?
Por Paul Hunt, Socialist Alternative (ASI en Inglaterra, Gales y Escocia)
Las ideas de León Trotsky y el trotskismo han sido muy difamadas y distorsionadas a lo largo de la historia pero, ¿quién fue León Trotsky, qué es el trotskismo y cuál es la relevancia para las luchas que enfrentamos hoy en la década del 2020?
¿Quién fue Trotsky?
Winston Churchill, el líder racista del imperialismo británico dijo una vez: “¡Odio a Trotsky! Es algo muy bueno que Stalin se haya desquitado con él”. Stalin, por su parte, se enfureció: “El trotskismo se ha transformado en una banda frenética y sin principios de saboteadores, diversionistas, espías y asesinos”.
En estas dos citas podemos ver el odio visceral expresado hacia Trotsky y las ideas por las que luchó: el socialismo revolucionario, el internacionalismo y la democracia obrera. Fue odiado y temido tanto por los imperialistas como por los estalinistas.
La vida de trotsky
Nacido en 1879, desde jóven desempeñó un papel destacado en el movimiento obrero. Este artículo detalla el evento monumental de la Revolución Rusa, dirigida por los bolcheviques con Lenin y Trotsky jugando un papel fundamental.
Tras la victoria de los trabajadores y oprimidos, 21 ejércitos del imperialismo intentaron acabar con el jóven estado obrero. Trotsky creó el Ejército Rojo desde cero, que finalmente pudo rechazar los intentos de destruir la revolución.
La revolución sobrevivió, pero tras las derrotas de los movimientos revolucionarios en Europa, particularmente en Alemania, permaneció aislada. En esta situación se desarrolló una burocracia encabezada por Stalin. A pesar de la perspectiva internacionalista de la revolución de 1917 y de los líderes bolcheviques, los estalinistas propusieron la teoría del “socialismo en un solo país” que, en efecto, abandonó la idea de la revolución mundial, en contra de los objetivos de los bolcheviques y de Lenin.
Río de sangre
A los enemigos de la revolución y del socialismo en general les gusta ver el estalinismo como un resultado lógico del socialismo y afirman que cualquier movimiento revolucionario terminará en burocracia y dictadura, que las semillas de esta degeneración se encuentran en el bolchevismo. Nada más lejos de la verdad. El mismo Lenin propuso un bloque con Trotsky contra Stalin en su lecho de muerte para defender los ideales de la revolución.
En efecto, Stalin y la burocracia tuvieron que lanzar una guerra civil contra las ideas de la Revolución de Octubre, una guerra contra el internacionalismo y la democracia obrera, que también fue de la mano del eventual retroceso de las conquistas sociales de la revolución.
Trotsky, junto con muchos otros, formó la Oposición de Izquierda para contraatacar. A medida que la contrarrevolución estalinista se aceleraba, Trotsky fue expulsado del Partido Comunista y exiliado. Decenas de miles de oposicionistas de izquierda fueron enviados a campos en Siberia donde fueron encarcelados y torturados. A pesar de la horrenda represión estatal, mantuvieron viva la llama del marxismo contra las mentiras y tergiversaciones de los estalinistas, produciendo el Boletín de la Oposición, que se distribuía clandestinamente.
Trotsky escribió en su clásico de 1937 La revolución traicionada:
“La caída de la actual dictadura burocrática, si no fuera reemplazada por un nuevo poder socialista, significaría así un retorno a las relaciones capitalistas con una caída catastrófica de la industria y la cultura”.
Esto es lo que ocurrió con el colapso de la URSS. El análisis desarrollado por Trotsky ayudó a explicar lo que estaba ocurriendo, mientras guiaba a los revolucionarios sobre las tareas que enfrentaban los trabajadores en la Unión Soviética.
Luchando contra el fascismo
Los escritos de Trotsky sobre cómo combatir el fascismo en la década de 1930 siguen siendo muy relevantes. Los Partidos Comunistas en ese momento oscilaron entre la idea del ‘socialfascismo’ (donde se decía que los líderes de los partidos socialdemócratas de masas eran peores que fascistas) y la del Frente Popular, que las organizaciones de la clase obrera deberían aliarse con una supuesta sección ´progresista´ de la clase capitalista para detener el fascismo.
Los resultados de estas políticas equivocadas significaron tragedia y derrota para la revolución española y la victoria de Franco, y en Alemania donde los comunistas y socialdemócratas ayudaron a allanar el camino para Hitler. Trotsky abogó por un frente único de organizaciones obreras en Alemania para aplastar a las fuerzas del fascismo, pero los líderes del Partido Comunista lo ignoraron con terribles resultados.
Revolución permanente
Su desarrollo de la teoría de la revolución permanente, en contra de la ortodoxia de la mayoría de los marxistas a principios del siglo XX, se demostró correcto por los acontecimientos de la revolución rusa, mostrando lo dinámico y original que fue como pensador, y es muy relevante ahora.
Trotsky argumentó que la clase capitalista en Rusia era demasiado débil y estaba demasiado atada al capital extranjero para desempeñar el amable papel histórico que tuvo en países como Francia y Gran Bretaña, al deshacerse del feudalismo y establecer un estado-nación capitalista. Por lo tanto, le correspondía a la clase trabajadora desempeñar el papel principal no sólo para deshacerse de las cadenas de la opresión feudal, sino también para avanzar en las tareas de la revolución socialista para garantizar los derechos democráticos y nacionales.
La teoría de la revolución permanente es hoy una guía en el mundo neocolonial donde el capitalismo se ha mostrado incapaz de garantizar los derechos y libertades democráticos básicos.
El trotskismo hoy
Trotsky finalmente fue asesinado por un agente estalinista en México en 1940. Sin embargo, él y sus seguidores habían asegurado la continuidad del socialismo revolucionario y el internacionalismo. El socialista estadounidense James P Cannon describió el trotskismo como “no un nuevo movimiento, ni una nueva doctrina, sino la restauración, el renacimiento del marxismo genuino”.
El internacionalismo de Trotsky no era abstracto, sino que fluía de su comprensión de la necesidad de derrotar al capitalismo a escala global. Desempeñó un papel clave en la decisión de los bolcheviques de formar la Tercera Internacional (Comunista) en 1919 y, después de la degeneración de esa organización, luchó por la creación de la Cuarta Internacional en 1938. La incipiente Cuarta Internacional no pudo sobrevivir al impacto de la Segunda Guerra Mundial. Muchos de sus miembros principales fueron asesinados, y no tenía la experiencia política para poder soportar la complicada situación que siguió a la guerra y posteriormente degeneró.
Alternativa Socialista Internacional
ASI tiene sus raíces en la revolución bolchevique, la lucha de Trotsky contra el estalinismo y la necesidad de un cambio socialista internacional. Nuestros precursores comenzaron el proceso de reconstrucción de un partido mundial de la revolución socialista, uno que continuamos hoy en más de 30 países porque la crisis global del capitalismo y la naturaleza del sistema lo hacen necesario. Estamos convirtiendo a la ASI en una fuerza que puede cambiar decisivamente el curso de la historia y las ideas del trotskismo serán fundamentales para ello. Instamos a todxs lxs lectores a unirse a nosotrxs en esta importante tarea.