Continúa la revolución política de Seattle
Kshama Sawant reelegida
La votación, en la que Kshama Sawant obtuvo el 55,47% de los votos, se produjo la semana pasada. El siguiente artículo de Patrick
Ayers (Alternativa Socialista, CIT en EEUU) fue publicado en socialistalternative.org el 4 de noviembre.
Los
socialistas no solamente pueden ganar representación en las
instituciones sino que pueden ser reelegidos. En el momento de
escribir estas líneas, con alrededor de un tercio de los votos
contados, el 52,6% de los votantes del Distrito 3 de Seattle han
elegido a Kshama Sawant para otro mandato de cuatro años como
concejal en el ayuntamiento. Como los últimos votos suelen estar a
nuestro favor, podemos proclamar nuestra victoria con confianza.
En
el barrio de Capitol Hill de Seattle esta noche cientos de
simpatizantes de la campaña están celebrando nuestra fiesta de
noche electoral. La gente ha ganado confianza gracias al
impresionante trabajo de Kshama en el ayuntamiento y nuestra intensa
campaña en las calles.
La
noche del lunes 2 de noviembre el miembro de Alternativa Socialista y
mecánico en Boeing IAM Jeremy Prickett se dirigió a los voluntarios
que se habían reunido para la última noche de campaña puerta a
puerta. “Hermanos y hermanas, es un privilegio para nosotros estar
aquí hoy porque durante demasiado tiempo la política ha estado
fuera del alcance de la clase trabajadora. Alternativa Socialista y
Kshama Sawant están cambiando esto”.
Más
de 600 voluntarios, 30 sindicatos y decenas de organizaciones
progresistas han apoyado a Kshama contra su oponente electoral, al
que apoyaban gerentes de empresas, la Cámara de Comercio, los
lobbies inmobiliario y de arrendadores, Amazon, dueños de tugurios,
6 concejales conservadores del ayuntamiento e incluso un puñado de
republicanos millonarios que crearon su propio Comité de Acción
Política (grupos de financiación de campañas) para atacarnos y
apoyar a nuestro oponente, del Partido Demócrata, durante las
últimas semanas.
Contra
la oposición de un “establishment” poderoso, junto con el eco de
los ataques vitriólicos de la Cámara de Comercio y sus
desorbitantes cuentas bancarias, nosotros llamamos a 90.000 puertas,
e hicimos 170.000 llamadas de teléfono. Hablamos con miles de
personas sobre vivienda asequible, desigualdad, aumentar los
impuestos a los ricos, y políticas a favor de la clase trabajadora.
Fue una campaña desde las bases sin precedentes en la política de
Seattle.
Un
nuevo tipo de políticas
Como
sugieren las palabras de Jeremy, para muchas personas ésta era mucho
más que la campaña de reelección de Kshama. Se trataba de
construir un tipo de política completamente nuevo que no se disculpe
por luchar por las familias trabajadoras y no por las grandes
empresas. Se trataba de mostrar que era posible que la gente
trabajadora se organizara.
En
la era de Ciudadanos Unidos (organización que apoya campañas
conservadoras) y en el año en el que las empresas de Seattle han
gastado cinco veces más que nunca en las elecciones locales, hemos
roto los récords de recaudación de fondos para la carrera
electoral, derrotando a las empresas. Recaudamos cerca de medio
millón de dólares de más de 3.500 donantes. Nuestra donación
mediana fue de solamente 50 dólares y más personas donaron a
nuestra campaña desde Seattle y nuestro distrito que parea ningún
otro candidato en toda la ciudad. Como la campaña de Bernie Sanders,
que también rechaza las donaciones de empresas y recaudó 28
millones de euros en 3 meses, la campaña de Kshama es una
manifestación del gran potencial para las políticas de clase
trabajadora independientes en los EEUU.
“El
grado con el que (Kshama Sawant) derrotó a todos en algunos aspectos
de recaudación y su habilidad para tener muchos pequeños donantes
es la señal más clara en estas elecciones de que la vieja guardia
ha sido sacudida” – Crosscut.com (diario online de Seattle)
Construcción del movimiento
Nadie
en Seattle ha causado más dolores de cabeza a los poderes
establecidos en los últimos dos años que Kshama Sawant. “Llevo el
nombre de socialista con orgullo”, declaró en enero de 2014 en su
discurso de inauguración después de haber derrotado al que había
sido concejal durante 13 años. Entonces prometió: “No habrá
acuerdos a puerta cerrada con las empresas o con sus lacayos
políticos. No habrá traiciones a la gente que represento.
Y
Kshama lo cumplió. Su oficina se convirtió en un centro para la
resistencia obrera, ayudando a arrendatarios, trabajadores, gente de
color y de la comunidad LGBTQ, inmigrantes e indígenas. Kshama
empujó el debate político hacia la izquierda. “Vivienda
asequible” se ha convertido en una de las expresiones más
repetidas. Sin embargo, Kshama fue bloqueada muchas veces por la
mayoría conservadora en el ayuntamiento que está atada a las
grandes empresas de mil maneras diferentes. Pero nunca cedió en su
lucha sin descanso por los intereses de la gente trabajadora,
explicando una y otra vez que lo que podía ganarse en los plenos del
ayuntamiento dependía principalmente de la fuerza del moviento fuera
– y haciendo activamente todo lo posible para ayudar a construir
este movimiento.
El
mismo espíritu impregnó la campaña electoral. Aunque sabíamos que
teníamos una posición fuerte con un mar de posters rojos y carteles
en los patios del distrito, no tomamos nada por sentado dada la forma
en la que la democracia es retorcida por el capitalismo, donde el
dinero compra votos y los medios de comunicación estrechan y
distorsionan los debates. Por el contrario, nosotros nos basamos en
la construcción de una fuerza independiente que podría alcanzar a
miles de votantes activando a gente trabajadora y joven para hablar a
otros miles de personas en la puerta de sus casas.
Cuando
tres diferentes Comités de Acción Política inundaron la campaña
con 60.000 dólares en las últimas semanas de campaña, nuestro
movimiento de bases estaba preparado. En pocos días fuimos capaces
de poner miles de panfletos en los buzones del distrito, alertando a
los votantes de la marea de dinero de los Comités. Y cuando nuestro
oponente envió dos ataques en forma de correos con publicidad
negativa en la última semana, de nuevo sacamos otro panfleto
distribuido a miles de casas para exponer la falsedad de sus ataques.
Un ejemplo de construcción
Como
primera concejal socialista electa en Seattle en un siglo, la
reelección de Kshama tuvo una importancia mayor que una elección
local media. Al Jazeera la calificó como una de las 7 elecciones a
seguir en todos los EEUU. La campaña tuvo lugar contra el transfondo
nacional del creciente apoyo a la campaña de Bernie Sanders como
presidente socialista y su llamamiento a una “revolución política
contra la clase billonaria”.
Sin
duda, la experiencia de los últimos dos años en Seattle ha
proporcionado muchas lecciones para los socialistas y la gente
trabajadora en todo el mundo. Kshama sería la primera en decir que
la diferencia clave en Seattle ha sido la existencia de un movimiento
socialista organizado en Seattle, y particularmente de Alternativa
Socialista.
Hemos
proporcionado un apoyo político clave a Kshama para ayudarla a
superar las presiones de un cargo electo y la construcción de un
movimiento. Juntos, fuimos capaces de dar un liderazgo exitoso y
dirigir la rabia que crecía contra la desigualdad, los alquileres
desorbitados, un poder establecido sin contacto con la realidad hacia
un movimiento que se basa en su propia fuerza, su fuerza organización
y sus propios recursos.
Las
oportunidades de construir el movimiento socialista en los EEUU están
aumentando. El capitalismo ha fallado completamente a las familias
trabajadoras. La gente está harta del poder de las empresas y hay un
interés creciente por las ideas socialistas, que se refleja en el
intenso interés cuando Bernie Sanders explicó por qué se considera
un socialista democrático en el debate con Hillary Clinton. El
movimiento por un salario mínimo de 15 dólares por hora ha ganado
una serie de victorias imporantes alrededor del país, los
estudiantes están empezando a luchar contra las deudas que contraen
para estudiar, y una nueva generación de jóvenes activistas se han
activado con la campaña “Black Lives Matter” (Las vidas negras
importan). El mundo está cambiando y nunca ha habido un mejor tiempo
para unirse a los socialistas.
Nuestro
trabajo, de ninguna manera, termina esta noche. Tenemos que
aprovechar esta oportunidad para construir sobre nuestra victoria. En
primer lugar, esto significa aun más organización. Ha sido la
construcción del movimiento la que nos ha llevado tan lejos. Pedimos
a toda la gente que se unan a Alternativa Socialista y nos ayuden a
organizar movimientos aún más fuertes que puedan ganar más
victorias en los próximos años.
Esta
noche en Seattle, con la elección de Kshama asegurada, nuestros
voluntarios están disfrutando de una celebración bien merecida que
probablemente durará hasta bien entrada la noche. Estamos orgullosos
de saber que tantas personas alrededor del país y del mundo están
celebrándolo con nosotros. Esta victoria pertenece a los socialistas
y la gente trabajadora de todas partes. Juntos, tenemos un mundo que
ganar.